El 24 de diciembre de 2020, Costa Rica, México y Chile, a la vanguardia América Latina, empezaron a vacunar contra la COVID-19. Para marzo de 2021, casi todos los países de la región han puesto alguna dosis contra el SARS-CoV-2.
Actualmente hay en uso 13 vacunas desarrolladas por Estados Unidos (3), Rusia (3), China (3), Reino Unido (1), Alemania (1), India (1) y Kazajistán (1), esta última solo en uso en ese país. De ellas, solo tres han sido aprobadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS): Astra-Zeneca/Oxford, Pfizer/BioNTech y Janssen/Johnson & Johnson.
La iniciativa COVID-19 Vaccines Global Access (COVAX) ha sido la principal fuente de suministro para muchos países de la región. COVAX es una plataforma global para apoyar el desarrollo, la fabricación y la distribución de vacunas contra la COVID-19. Fue lanzada en abril de 2020 por la OMS, la Coalición para la Promoción de Innovaciones en pro de la Preparación ante las Epidemias (CEPI), la Alianza Mundial para las Vacunas (Gavi), Unicef y la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Como parte de esta, la COVAX Facility es un mecanismo de obtención que compra vacunas a un portafolio de productores en nombre de países que son miembros de COVAX.
Sin embargo, según informaciones de la ONU, en comparación con los países más ricos, la mayoría de los países de América Latina y el Caribe (con la excepción de Chile) no han podido asegurar suficientes vacunas potenciales para cubrir a toda su población, un hecho que se vuelve más marcado cuando esas compras se restringen solo a las vacunas que están actualmente autorizadas.
En América Latina y el Caribe, 37 países recibirán vacunas a través del mecanismo COVAX, de los cuales 27 lo harán con financiamiento propio y 10 sin costo (Bolivia, Dominica, El Salvador, Granada, Guyana, Haití, Honduras, Nicaragua, Santa Lucía y San Vicente y las Granadinas), de acuerdo con un comunicado de prensa de la OPS. Cuba es el único país de la región que no se ha unido a COVAX.
No todos los países están aplicando las mismas vacunas, incluso en una misma nación se aplican diferentes modelos. Un estudio subraya que la mayoría de los gobiernos latinoamericanos ha puesto en marcha una estrategia mixta para comprar vacunas, bien adquiriéndolas por su cuenta, mediante negociaciones directas con las farmacéuticas o ciertos gobiernos, o bien entrando en el programa COVAX. Las más populares han sido la Astra-Zeneca y la Pfizer/BioNTech.
De acuerdo con un reporte del periódico El País, América Latina y el Caribe no tienen la cantidad de vacunas que necesitan. El 87 % de las dosis están en manos de solo cuatro países: Brasil (15 millones), Chile (8,6 millones), México y Argentina (4 millones). Otros cuentan con pocos miles, como es el caso de Paraguay (4 000), Ecuador (73 000) o El Salvador (20 000).
Mecanismo COVAX
Existen dos tipos de países participando en la COVAX Facility. El primero lo conforman 90 países con autofinanciamiento. Estos pueden comprar vacunas para inmunizar desde un 10 % a un 50 % de su población. En 2021, COVAX planea distribuir 485 millones de vacunas a países autofinanciados.
El segundo grupo lo conforman países de medianos y bajos ingresos, que son financiados y no pagarán por las vacunas. Las dosis para estos países están cubiertas por el Gavi y COVAX Advance Market Commitment (AMC). COVAX planea distribuir 1.8 billones de vacunas a los países financiados en 2021.
El 16 de diciembre de 2020, en el sitio oficial de la ONU, Jarbas Barbosa, subdirector de la Organización Panamericana de la Salud, afirmó que todos los países en América Latina y el Caribe que participan en el mecanismo internacional COVAX recibirían las vacunas al mismo tiempo, tanto si pagan por ellas como si las reciben gratuitamente. Sin embargo, en la práctica, ha habido retrasos con la llegada de las vacunas.
COVAX planea entregar 35.3 millones de dosis a América Latina y el Caribe para fines de junio. Según información ofrecida por la ONU, los países latinoamericanos recibirán, entre marzo y mayo, más de 26 millones de vacunas: Brasil (9.1 millones) y México (5.5 millones), ambos con financiación propia; en Sudamérica: Argentina (1.9 millones), Perú (1.2 millones), Chile (818 000), Ecuador (756 000), Bolivia (672 000), Paraguay (304 000) y Uruguay (148 000); en Centroamérica: Guatemala (724 000), Honduras (424 000), Nicaragua (432 000), El Salvador (225 000), Costa Rica (218 000) y Panamá (184 000); mientras tanto, en el Caribe, República Dominicana tendrá 463 000 dosis de la vacuna.
Un reporte de BBC del 9 de marzo de 2021, cita a Agathe Demarais, directora de pronóstico global de la Unidad de Inteligencia del Economist (EIU), quien concluye que “incluso si las cosas van según lo planeado, el programa COVAX solo apunta a cubrir entre el 20 % y el 27 % de la población de un país este año”.
Otras vías de acceso: donaciones, acuerdos y contratos pagados
En diciembre de 2020, Jarbas Barbosa, subdirector de la OPS, declaró que entre las naciones miembros de COVAX también hay países que firmaron acuerdos bilaterales con algunos productores de vacunas, por lo que dispondrán de ambas alternativas.
Un reporte de Deutsche Welle (DW) afirma que cada país latinoamericano ha hecho acuerdos individuales con diferentes laboratorios. Casi sin industria propia, los países de la región dependen de la disponibilidad en el mercado externo, y al negociar cada uno por separado, los costos se elevan.
“Las negociaciones de los grandes laboratorios no son transparentes, porque negocian por países y no en forma concertada. La manera como se relacionan las grandes farmacéuticas y los gobiernos, y la falta de transparencia en las negociaciones es uno de los graves problemas de salud global que tenemos”, declaró el politólogo Miguel Lago, director ejecutivo del Instituto de Estudios para Políticas de Salud (IEPS) de Brasil a DW.
En términos generales los estados han destinado partidas millonarias para la compra de las vacunas; sin embargo, según Unicef, las vacunas aprobadas que América Latina puede comprar tienen precios muy diferentes según el país y el proveedor, y varían desde los 2.7 USD hasta los 44 dólares por dosis.
Algunos ejemplos de esos pagos, que los gobiernos han transparentado, son los siguientes:
Chile: Tiene comprometidas más de 35 millones de vacunas, de Pfizer/BioNTech, Sinovac, Astra-Zeneca, Johnson&Johnson y la plataforma COVAX. Además, está en conversaciones para comprar Sputnik V, con lo que podría garantizar las dos dosis necesarias para toda la población, según un reporte de BBC.
“Hemos recibido un nuevo cargamento con 2 millones de dosis de vacunas Sinovac provenientes de China. Con esto completamos 12 millones de dosis de este tipo y seguiremos recibiendo más vacunas porque tenemos un convenio de entendimiento para recibir 20 millones de dosis anuales durante los próximos tres años”, señaló el Ministro de Salud, Enrique Paris, al recibir el sexto cargamento de vacunas del laboratorio chino el 21 de marzo. El Fondo para Vacunas COVID, aprobado del presupuesto nacional, alcanza los 200 millones de dólares.
Panamá: Compró 5.5 millones de vacunas por 56 millones de dólares: 3 millones de Pfizer; 1 092 000 de Astra-Zeneca; 300 000 de Johnson & Johnson; y 1 112 410 de COVAX.
Ecuador: Según comunicados oficiales, el gobierno destinó cerca de 200 millones de dólares para comprar 18 millones de dosis. Sin embargo, ha habido varias irregularidades: vacunados VIP (el Ministerio de Salud y el gobierno se niegan a entregar la lista); ausencia de un plan claro de vacunación; el ministro de salud Juan Carlos Zevallos, que estuvo al frente durante los meses más fuertes de la pandemia, renunció después de vacunarse él y su familia; entre otras. También recibió una donación de 20 000 dosis de Sinovac de Chile.
Brasil: Actualmente está administrando CoronaVac/Sinovac y Astra-Zeneca/Oxford; pero también ha comprado Sputnik V y Pfizer. Según fuentes oficiales, ha realizado contratos con siete laboratorios o mecanismos distribuidores: Fiocruz/Astra-Zeneca/Oxford; Butantan/Sinovac (2 991 millones de reales); Precisa/Bharat Biotech (1 614 millones de reales); União Química/Gamaleya (2 991 millones de reales); Pfizer/BioNTech (1 000 millones de reales); Janssen (380 millones de reales); y con COVAX Facility para lo que se liberaron 2 500 millones de reales, según la Medida Provisional No. 1004/20, por lo que recibirá un estimado de 10 a 14 millones de dosis de la vacuna Astra-Zeneca /Oxford. En total, más de 204 millones de dólares hasta el momento.
Uruguay: Recibirá más de 2 millones de dosis de los laboratorios Sinovac, Pfizer/BioNtech y del grupo COVAX entre marzo y abril, y continúa en negociaciones con otros laboratorios. Según las autoridades, el monto de la inversión ascendió a 120 millones de dólares. La compra fue aprobada de forma unánime por el Tribunal de Cuentas, confirmó Luis Lacalle y aseguró que prosiguen las negociaciones con 3 laboratorios más.
Según datos del Ministerio de Economía y Finanzas a los que accedió el semanario Búsqueda de Uruguay, el 12 de febrero se autorizó el pago de 9 765 000 USD a Sinovac Life Sciencies Co. Ltd., ubicada en China. Ese pago se realizó por 192 000 dosis, lo que equivale a 50 dólares por dosis. Sin embargo, el lunes 8 de marzo se autorizó otro pago para ese laboratorio de 16 275 000 USD por 1 558 000 dosis, por lo que el precio de la segunda tanda de vacunas bajó a 10 dólares la dosis. Por otra parte, el 25 de febrero se emitió un pago por 9 009 000 USD para el laboratorio estadounidense Pfizer por una primera entrega de 200 000 dosis. Esa transacción equivale a 45 dólares por dosis.
Colombia: Según su Ministerio de Salud suman 3 billones de pesos (aproximadamente 827 374 USD) para garantizar 61.5 millones de dosis. Estas se distribuyen de la siguiente manera: al mecanismo COVAX han destinado 818.929 millones de pesos para obtener 20 millones de dosis (40.9 pesos promedio cada dosis); para la Pfizer/BioNTech fueron 437 189 millones de pesos (43.7) para 10 millones de dosis; para Astra-Zeneca/Oxford se destinaron 281 766 millones (28.1) y un billón de pesos para Moderna (106.8), en ambos casos para 10 millones de dosis cada una, para la vacuna Janssen se destinaron 312 012 millones para 9 millones de vacunas (34.66) y para Sinovac fueron 159 417 millones para 2,5 millones de dosis (63.7 dosis). Colombia Check verificó esta información.
Es el primero en aprobar el 25 de marzo la Janssen en América Latina
Argentina: Según DW, se dictó una ley para incluir cláusulas de confidencialidad y bloquear el acceso a información sobre precios y convenios de compra. No obstante, en una entrevista con Página 12, el presidente Alberto Fernández reveló que el precio por dosis de Sinopharm era 20 dólares, Sputnik 4.75 USD y Astra-Zeneca 4.5 USD, y que gracias a las negociaciones Sinopharm había bajado su valor.
México: Ha pagado más de 6 251 millones de pesos mexicanos para la entrega de vacunas desarrolladas contra el nuevo coronavirus. El gobierno ha hecho pagos a Pfizer y a la iniciativa COVAX, y también ha firmado acuerdos de compra con las farmacéuticas Astra-Zeneca y Cansino-Biologics, informó la presidencia mexicana a finales de 2020. También negoció con el premier ruso el envío de 21 millones de dosis de Sputnik V. Además, participa en ensayos en curso de diferentes candidatos.
Otros países han recibido dosis por acuerdos y/o donaciones. En ese caso se encuentran:
Venezuela: Firmó un acuerdo con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) para suministrar la Sputnik V en una primera etapa para 10 millones de personas. Las primeras dosis llegaron el 13 de febrero. Nicolás Maduro dijo que su país había invertido 200 millones de dólares.
Guatemala: Recibió una donación de Israel de 5 000 dosis de Moderna y el 11 de marzo recibió 81 600 dosis de Astra-Zeneca del mecanismo COVAX.
Bolivia: Firmó un acuerdo con el fabricante Sinopharm para un suministro inicial de 500 000 dosis de vacunas, y el presidente boliviano Luis Arce anunció que 100 000 de esas dosis eran donaciones. También han comprado Sputnik V y Astra-Zeneca, pero no es público el monto destinado a ello.
Paraguay: Recibió en febrero 4 000 dosis de COVAX; luego Chile donó 20 000 dosis y Emiratos Árabes donó 3 000. En la tercera semana de marzo llegaron 36 000 dosis más del mecanismo COVAX y se espera que lleguen otras donaciones de India (200 000) y de Catar (400 000).
En la región del Caribe la mayoría de los países han comenzado la vacunación con pequeñas dosis. República Dominicana comenzó el 10 de febrero y Jamaica recibió el primer lote de COVAX el 15 de marzo, también Bahamas, San Cristóbal y Nieves, Barbados y Trinidad y Tobago han arrancado, en la mayoría de los casos Astra-Zeneka es la vacuna que ha preponderado. Para el Caribe el mecanismo COVAX es una de las principales estrategias para conseguir la vacuna, aunque se espera que sea en mayo cuando llegue la mayor cantidad de dosis.
El primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, denunció a finales de febrero los problemas del país caribeño y otros pequeños territorios para acceder a las vacunas del mercado internacional. Dijo que el país se unió a COVAX a un costo total de 9.7 millones de dólares, que iban a ser la garantía para recibir las vacunas en un plazo de tiempo razonable, pero la comunicación ha sido deficiente. “Algunas empresas no hablarán contigo a menos que puedas comprar 3 millones de dosis. No hay forma de que Trinidad y Tobago necesite esa cantidad, la pueda almacenar o pagar al mismo tiempo”, dijo.
Haití es el único país que, hasta finales de marzo, no ha anunciado ningún mecanismo de vacunación. COVAX le ha asignado 756 000 dosis, pero aún no ha realizado el primer envío.
Chile, China, India, Israel y Estados Unidos son los países que han donado dosis a otros países de la región. Chile a Ecuador y Paraguay; China a Bolivia, República Dominicana y Venezuela; Israel a Guatemala y Honduras; India fundamentalmente al Caribe (San Cristóbal y Nieves, Surinam, San Vicente, Santa Lucía, Guyana, Dominica y República Dominicana, Belice, Barbados, Bahamas y Antigua y Barbuda) y a Nicaragua y Guatemala.
Estados Unidos anunció el envío de 1.5 millones de dosis a México, tras un acuerdo entre los presidentes Joe Biden y López Obrador.
Para la Organización Mundial de la Salud la inmunidad colectiva contra la COVID-19 se logrará cuando entre el 60 % y el 70 % de la población pueda vacunarse. El tiempo total para lograr la inmunización en América Latina no depende necesariamente de que inicie el proceso de vacunación, aunque es un primer paso muy necesario; haber previsto acuerdos adelantados con las farmacéuticas, tener capacidad de financiamiento para comprar grandes cantidades, disputar los calendarios de entrega y organizar un buen plan de vacunación también son elementos de peso. A países con una mayor población, como Brasil (210 millones), México (127 millones), Colombia (48 millones), Argentina (44 millones) o Perú (32 millones), les tomará mucho más tiempo.
Cuba: caso aparte
La apuesta de Cuba es por sus candidatos nacionales, los cuales no solo ha desarrollado, sino que cuenta con toda la tecnología –aunque no necesariamente con toda la materia prima– para su producción. Esta sería la primera vacuna completamente latinoamericana. Las autoridades han anunciado que el país tiene capacidad de producir 100 millones de dosis, más de las que necesita para inmunizar a toda la población. Un proceso que espera completar durante el 2021.
De los cuatro candidatos vacunales del país, dos de ellos se encuentran en la fase III de ensayo clínico: Soberana 02 (probará su eficacia en 44 010 sujetos en La Habana y 100 000 en Irán) y Abdala (48 000 personas en varias provincias en el oriente del país). Además, con Soberana 02 se aprobó un estudios de intervención controlado en la capital que en su primera fase incluye 74 665 personas, sobre todo personal médico, y en un segundo momento alcanzará a casi la totalidad de los residentes en La Habana. Se llegará a 1.7 millones de personas mayores de 19 años con estos estudios. En el caso de Abdala, el 27 de marzo recibió autorización también para un estudio de intervención controlado.
Cuba tiene una experiencia previa en producción y suministro de vacunas a toda la población. El país garantiza de forma gratuita el acceso a 11 vacunas (de ellas, 8 son de producción nacional) contra 14 enfermedades desde la infancia.
“Hemos pensado que ese camino a la vacunación a escala poblacional, cuando se tengan los permisos, pueda darse a partir de grupos de riesgo. Por ejemplo, los grupos etarios y trabajadores de la salud, empezando por los mayores de 60, estratificando en edades y avanzando en todas las provincias del país. Al cierre de julio y primeros días de agosto, estaríamos completando estos grupos, que suman aproximadamente 4 millones, para comenzar en agosto con un promedio de 6 millones y así hasta ver un horizonte alrededor de septiembre, explicó en el programa Mesa Redonda Ileana Morales Suárez, directora nacional de Ciencia e Innovación Tecnológica del Ministerio de Salud Pública.
Sobre la producción de las vacunas para asegurar la vacunación masiva el Doctor en Ciencias Eulogio Pimentel Vázquez, vicepresidente de BioCubaFarma, explicó que toda la estrategia productiva e industrial de Soberana 01, Soberana 02 y Soberana Plus pasa por una ruta tecnológica que no interfiere con los candidatos Abdala y Mambisa. “Esto nos permite asegurar que para agosto habrá suficientes inventarios de dosis que permitan cumplir todo el programa diseñado y, además, productos para abordar todas las colaboraciones”.
Fuentes de datos recomendados:
Escribo debido a mis inquietudes cognoscitivas respecto al candidato vacunal ABDALA. Me gustaría saber ¿por qué si el candidato vacunal ABDALA no ha sido probada su eficacia por la OMS y BBC está siendo utilizado actualmente en la inmunización del personal de salud cubano? Y en vista de ser aplicado a la población? No encuentro información al respecto. Gracias
Esta periodista a escrito Baiden, en vez de Biden. Esta bien escrito?