Este 21 de febrero Cuba alcanzó un nuevo récord de contagios diarios de COVID-19. Con los 1 039 positivos de la jornada, el país suma 44 523 casos confirmados desde marzo de 2020.
La intensificación de la pandemia ocurre en un contexto de crisis económica sostenida, palpable en el desabastecimiento diario de productos básicos. El PIB decreció un 11 % en 2020, pues a las fallas acumuladas del modelo económico cubano se sumaron la contracción del comercio exterior, la disminución del turismo internacional y de los ingresos de divisas que trajo el cierre de fronteras por más de seis meses, el aumento del gasto en Salud Pública y el endurecimiento de las sanciones del gobierno estadounidense.
Desde principios de 2021 comenzó la llamada “Tarea Ordenamiento”, que ha incluido un proceso de unificación cambiaria y monetaria con la eliminación gradual del peso convertible (CUC) del mercado y reajustes salariales que no se corresponden en todos los casos con la subida de precios y la eliminación de subsidios en algunos sectores. Estas medidas, que generan nuevas dinámicas y dificultades debido a la deprimida producción de bienes y servicios, añaden más presión a la cotidianidad de la sociedad cubana.
Cuba, que hasta hoy no ha vivido un colapso del sistema sanitario y cuya cifra de fallecidos no supera los 300, ha desarrollado varios medicamentos para tratar la COVID-19 con una industria propia de biotecnología. Entre ellos destaca Soberana 02 como el más avanzado de cuatro candidatos vacunales. Actualmente en fase IIa, este candidato ha mostrado elevados parámetros de seguridad para su uso en seres humanos.
Ante el avance de las fases de evaluación y la sobreabundancia de noticias sobre las vacunas que han comenzado a utilizarse en el mundo, nuestro deber como medios de comunicación es aportar información valiosa y verificar noticias sobre los procesos científicos. Contribuir a que la población tenga todos los detalles vinculados a la inmunización, es una de las razones para retomar este esfuerzo conjunto entre ambos equipos de trabajo.
También seguiremos contando las historias de pacientes y familias afectadas por el virus, así como las repercusiones de la crisis económica en grupos vulnerables: personas de la tercera edad y discapacitadas, mujeres, entre otros. En este periodo prolongado de desabastecimiento, compartiremos las soluciones que en materia de seguridad alimentaria adoptan el gobierno y la ciudadanía.
Junto a expertos en Derecho analizaremos la implementación de nuevas normas jurídicas y expondremos, en caso de ocurrir, las violaciones de derechos humanos o ciudadanos que impliquen. Desde el inicio de este periodo pandémico los cubanos han vivido abusos de poder y excesos en la ejecución de medidas relacionadas con la limitación de movimiento, y de derechos como la libertad de expresión.
Cada día compartiremos una actualización de los nuevos casos y fallecidos, con una propuesta visual y una organización de datos que permite el fácil acceso a quienes nos siguen en los diferentes sitios de redes sociales.
Queremos seguir siendo una voz cercana que acompaña a nuestras audiencias y que también escucha, como hicimos desde mediados de marzo de 2020 cuando se detectaron los primeros casos de COVID-19 en Cuba. En ese entonces no imaginamos que 11 meses después el SARS-CoV-2 seguiría campeando en el mundo.
Desde esos primeros días en que la infodemia inundó nuestras vidas, nos enfocamos en la verificación de informaciones falsas, respondimos a dudas y preguntas y organizamos debates sobre las problemáticas sociales agudizadas en el contexto de pandemia. Entrevistamos a científicos, médicos, sociólogos, economistas, juristas, emprendedores y especialistas en temas de género.
Durante los más de seis meses de la primera etapa de cobertura conjunta entre Periodismo de Barrio y elTOQUE, intentamos estar cerca de las audiencias con iniciativas como el taller y espacio de aprendizaje “Después de abril”. Desde un grupo en Telegram los participantes aprendieron sobre fotografía y compartieron las imágenes realizadas en el periodo de confinamiento. Juntos creamos el podcast colaborativo Oye te cuento… Historias de cuarentena, que reunió los testimonios de cubanas y cubanos en varios lugares del mundo. Entre varias voces dejamos para la posteridad el recuento de los meses de más estricto aislamiento.
El bot chequeador Covide, que lanzamos en esos meses y que ofrece información seria y confiable relacionada con la pandemia, llega ahora actualizado.
También regresa la tira cómica Covidia y Pandemio, del artista Ramsés Morales Izquierdo. Las situaciones que vive esta pareja de ancianos, contadas desde el humor gráfico, reflejan las vicisitudes, dudas y absurdos que enfrentan personas de la tercera edad en Cuba.
En esta nueva fase esperamos contar una vez más con la colaboración de las audiencias y también con la participación de especialistas en diversas áreas. Nos impulsa el deseo de seguir brindando conocimientos que ayuden a la ciudadanía a tomar decisiones informadas.
¿Podrían dedicar algún articulo a explicar a qué costo Cuba ha desarrollado sus numerosos candidatos vacunales?. En otros países parece que mas atrasados en las biotecnologías como Francia, EEUU, Alemania, etc, al parecer eso cuesta caro. ¿De donde Cuba ha sacado ese presupuesto, en medio de la peor crisis de los últimos años? ¿Cómo Cuba abarata esos costos? ¿Cómo Cuba pensaba desarrollar la fase 3 del estudio si se mantenían cerradas las fronteras, o sea, sin tener los miles de personas necesarias para una muestra estadísticamente confiable, expuestas al virus? ¿Ha sido una suerte que la epidemia se propagara en Cuba justo ahora cuando los candidatos llegan a dicha fase, o un fío cálculo? ¿Qué ganancias piensa obtener Cuba con la vacuna? El abaratamiento de costes en Cuba en el desarrollo de productos biotecnológicos, ¿es extensible a otras ramas, como la formación de profesionales? ¿Cuál ha sido la tasa de éxitos de los candidatos vacunales en otros países? ¿Y en Cuba?…etc. Me gustaría ver periodismo de investigación enfocado a estas preguntas.