A las cinco de la tarde del sábado 9 de septiembre, en Alamar el transporte público todavía funcionaba (Foto: Jorge Ricardo)
Los árboles comenzaron a caer antes de lo esperado (Foto: Jorge Ricardo)
Los vecinos, ya sin luz, esperan la catástrofe (Foto: Jorge Ricardo)
Aunque Alamar es un reparto costero, no se vio afectado por las penetraciones del mar (Foto: Jorge Ricardo)
Una sombrilla de playa (Foto: Jorge Ricardo)
La curiosidad conduce a la gente hasta el mar (Foto: Jorge Ricardo)
En esta zona las olas alcanzaron unos cuatro metros de altura (Foto: Jorge Ricardo)
Un campesino deja a sus caballos comer y refrescarse antes de resguardarlos (Foto: Jorge Ricardo)
El azote del viento en el Parque José Martí de la Zona 1 (Foto: Jorge Ricardo)
Alamar y Cojímar desde un piso 16 (Foto: Jorge Ricardo)
La desolación en las calles (Foto: Jorge Ricardo)
En la oscuridad, los caminos se vuelven peligrosos (Foto: Jorge Ricardo)
Agua, luz y viento (Foto: Jorge Ricardo)